No sólo se han arreglado las fricciones existentes entre el Obispado gaditano y el Ayuntamiento, sino que se han sentado nuevas líneas de colaboración. Dos reuniones han conseguido un acuerdo que hace tan sólo un mes parecía, cuanto menos, improbable.

A finales del pasado mes de febrero, el Obispado daba a conocer su malestar con el Ayuntamiento. Incluso le envió un escrito en el que le exigía que paralizara las obras que este está ejecutando en el proyecto Entrecatedrales: no le habían pedido permiso para recubrir con piedra ostionera una fachada que es de la diócesis.

Y eso que, según explicaba el Obispado, llevaba un año pidiendo información sobre este proyecto, una reunión para hablar de esta obra y de otros intereses comunes.

Este escrito tuvo una rápida respuesta por parte del gobierno local y el pasado lunes se reunían la alcaldesa, Teófila Martínez, y el obispo, Antonio Ceballos, para tratar de reestablecer la normalidad en la relación entre ambas instituciones. El resultado de esta entrevista fue satisfactorio: ayer, los representantes municipales y los del Obispado iban a concretar, no a debatir. Así lo explicaban el día antes, al menos, desde la diócesis: había una directriz expresa de arreglarlo todo.

Y es que, problemas puntuales aparte, el equipo de gobierno y la Iglesia gaditana comparten el fin de mejorar la ciudad, razonaba tras el encuentro un portavoz del Obispado: "Si trabajamos conjuntamente será más provechoso".

De esta forma, el encuentro ha servido para cerrar las heridas abiertas en la relación entre ambas instituciones y para abrir nuevas líneas de trabajo conjunto. De esta forma, el equipo de gobierno municipal anunciaba en un comunicado que, junto con el Obispado, propiciarán la promoción turística y cultural de la capital gaditana.

Los protagonistas del encuentro fueron el portavoz del gobierno local y teniente de alcaldesa delegado de Urbanismo, Ignacio Romaní, y el vicario general de la Diócesis de Cádiz y Ceuta, Guillermo Domínguez Leonsegui, quienes estuvieron acompañados por técnicos del Obispado y del área municipal de Urbanismo.

El concejal señaló que con esta reunión se ha posibilitado "una comunicación más directa con la institución, para así solventar cualquier tipo de dudas que susciten los proyectos municipales". Con el encuentro celebrado ayer en la Casa Consistorial "hemos puesto al día todos los proyectos que Ayuntamiento y Obispado teníamos en común, hemos repasado las actuaciones pendientes y en las que estamos trabajando", dijo Romaní.

El delegado de Urbanismo confía en que la colaboración del Obispado "siga siendo la que es, en interés de la ciudad, puesto que es una institución muy importante que desarrolla un gran número de iniciativas sociales". En ese sentido, se abordó la celebración del Bicentenario de la Constitución de 1812, así como celebrar reuniones más sectoriales entre Ayuntamiento y Obispado para la promoción turística y cultural del legado eclesiástico.

Otro de los asuntos abordados fue la aprobación inicial del futuro Plan General de Ordenación Urbana, que en estos momentos se encuentra en fase de exposición pública. El concejal de Urbanismo adelantó que para la próxima semana visitará con el Obispado la exposición ubicada en el barrio de Santa María para explicarles las dudas que tengan del documento técnico, "tan importante para el desarrollo inmediato de la ciudad".

Algunas de las actuaciones contempladas en el documento urbanístico afectan directamente a la Iglesia. Empezando por las inmediaciones del propio Obispado, sus jardines, donde se contempla un proyecto que había pedido la Iglesia para aprovechar este espacio y darle un uso social. El anterior plan, aún en vigor, contemplaba otra actuación en la zona que jamás se llegó a ejecutar.

Además, el nuevo Plan General también incorpora la expropiación como herramienta para que el Ayuntamiento se haga con un centenar de metros en Varela. Este suelo, junto al solar contiguo que ya es municipal, será cedido a la Iglesia para equipamientos. Serán, en total, 400 metros cuadrados. En el barrio de Cortadura, en el antiguo Matadero, también está prevista la cesión de 625 metros cuadrados de terreno para un centro parroquial.

Las fichas del plan también recogen actuaciones ya planteadas como la rehabilitación del convento de Santa María y la creación de viviendas en su entorno o la reforma del Oratorio de San Felipe Neri que ya han iniciado diócesis y Junta. Igualmente, se prevé la rehabilitación de la iglesia del Carmen.

A lo largo del encuentro mantenido ayer también se acordó celebrar reuniones sectoriales donde se aborde la posibilidad de desarrollo de la vertiente social de la Diócesis de cara a la celebración del Bicentenario de la Constitución de 1812.

Romaní explicó que "teniendo en cuenta el arraigo tan importante que tiene a nivel social la diócesis de Cádiz y Ceuta, se posibilite el desarrollo conjunto de los valores que queremos inculcar en la sociedad ante la celebración del Bicentenario, de cara a propiciar una imagen positiva de la ciudad en todo el mundo". De esta forma, Ayuntamiento y Obispado potenciarán "todo lo que sea beneficioso para la ciudad".

En cuanto a asuntos pendientes entre ambas partes se encontraba el proyecto de Entrecatedrales. Romaní indicó que las obras no se han parado en ningún momento y "el proyecto continúa adelante". Aunque la diócesis contaba con información del arquitecto del proyecto, Alberto Campos Baeza, quería datos que procediesen del propio Ayuntamiento, encargado del proyecto. Por ello, durante el encuentro se ha ofrecido "información más concreta de plazos, tiempos y de cómo se va a mantener la estructura en el entorno, donde el propio Obispado cuenta con un edificio", añadió el concejal de Urbanismo.

A juicio de Romaní, "la reunión ha sido muy fructífera y ha servido para continuar con la comunicación fluida con el Obispado".

En el mismo sentido se manifestó la Iglesia gaditana, que indicaba que el encuentro había sido positivo ya que "se ha articulado todo y abierto canales de trabajo en materia de patrimonio, Plan General de Ordenación Urbana o cesión de terrenos".

Desde el Obispado se destaca la creación de dos canales de colaboración: por un lado, el trabajo ligado al urbanismo y, por otro, a la cultura, a la solidaridad o al turismo. Un campo este en el que la Iglesia puede aportar mucho porque posee un importante patrimonio tanto en inmuebles como en documentación. "El encuentro ha ido muy bien, con buena armonía y fluidez", resumía un portavoz.