Los detenidos por la trifulca que se originó en la presentación de un libro sobre la figura de José Antonio Primo de Rivera pasaron ayer a disposición judicial. Los arrestados fueron trasladados desde los calabozos de la Comisaría de San Fernando hasta los juzgados de instrucción de guardia de San José, donde se vivieron momentos de gran tensión, ya que a su llegada los estaban esperando tanto familiares como amigos y miembros del grupo Brigadas Amarillas, del que forman parte los ocho detenidos. Ayer fueron nueve los trasladados hasta San Fernando pero uno de ellos no tenía nada que ver con estos incidentes, sino que había sido detenido también ayer por la Policía por un presunto delito de malos tratos. 

Los arrestados entraron a los juzgados en muchos casos cubriéndose la cabeza para no ser fotografiados por los diferentes profesionales de los medios de comunicación presentes, que tuvieron muchas dificultades para llevar a cabo su labor informativa.