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Cádiz

Viejas carreras de motos, desde las de la playa de La Victoria a Valdelagrana Presentación

En 1968, con 16 años, Jaime Barrigá, gaditano nacido en Gerona, recibió un regalo mágico, un regalo que le marcaría toda la vida: una Vespa 75. A partir de ahí, todo fue moto. Barrigá, ingeniero técnico industrial que durante toda su carrera profesional se ha dedicado al sector de las autoescuelas, es el motorismo vivo de la provincia al haber mezclado su pasión por las dos ruedas con la de la fotografía. Gracias a él y a su tarea de investigación, intensificada tras su jubilación, se está recuperando buena parte de la memoria de los moteros de varias décadas. Ya lo llevaba haciendo varios años en su blog, a través del cual contactó con algunas de las personas que le han ido provisionando de fotos y de historias. Hoy presenta a las ocho de la tarde, en la Asociación de la Prensa de Cádiz, el fruto de toda esa tarea, su nuevo libro, Historia del motorismo en Cádiz. Desde 1928 a 1974, publicado por Círculo Rojo, y que sucede al que había recuperado imágenes de las legendarias carreras del circuito de La Merced en Jerez, la ciudad más motera de la provincia, y que fue publicado en su día por Diputación: Carreras de motos en circuitos urbanos: 1955-1981.

Para aquel libro contactó con la familia del que fue uno de los artífices de la relación de Jerez con las dos ruedas, Paco Pacheco. La aportación del motoclub fue decisiva para que Barrigá se lanzara a esa experiencia. Aquella publicación tuvo un notable éxito entre los aficionados. "Mucha gente piensa que vivo en Jerez y que por eso saqué aquel libro, pero yo soy de Cádiz y vivo en Cádiz y tenía la cosa de sacar la historia de las motos de la ciudad, pero había mucho más material de Jerez. Ahora he conseguido recopilar suficiente documentación de la relación de Cádiz con las motos y he logrado algunas imágenes inéditas que acompañan a un texto que a los aficionados creo que les va a emocionar porque es una historia que hasta ahora no se había contado", comenta.

Entre las fotos encontradas tiene especial predilección por la que aparece en la portada del libro. Data de 1928 y lleva la firma de uno de los grandes fotógrafos de la época, Dubois, que era nombre artístico y daría renombre a una dinastía de fotógrafos de la ciudad. Dubois llegó desde Sevilla, donde conoció a la gente de la organización de la carrera de Cádiz, con Ibáñez a la cabeza, dueño de los principales concesionarios de la ciudad. "Dicen que Dubois, al pisar Cádiz, se enamoró de su luz y su primer trabajo fue en esa carrera de la que existen magníficas fotos, algunas de las cuales reproduzco". Muchas de aquellas fotos se publicaron en Blanco y negro.

Se trata de las carreras que se celebraron en la playa de La Victoria en julio de aquel año en las que participaban alguno de los grandes corredores españoles de la época, como Manuel Cantó, Paulino Martín o Alfonso Martínez. Barrigá recrea, con crónicas sacadas del Diario de Cádiz de la época, aquella jornada en la que la población asistió a un espectáculo inédito. Barrigá incluso se asombró de la relevancia que debió tener el acontecimiento porque "el Diario de Cádiz le dedicaba la mayor parte de su primera página". Aquella carrera se celebró varios años aprovechando la longitud de la playa y la gran extensión de arena dura. Quizá aquel tiempo fue la época dorada del motociclismo en Cádiz mucho antes de que Jerez cogiera el testigo.

También Barrigá dedica un buen espacio a otras carreras que también tuvieron gran proyección, como serían las de la playa de Valdelagrana. Todas esas historias y otras muchas más desglosará esta tarde Barrigá, que aún sigue cabalgando a lomos de una Suzuki, en la Asocación de la Prensa.

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