El Presupuesto municipal de 2016 se enfrenta hoy a una jornada decisiva que puede enviarlos definitivamente al cajón, después de varios meses de trámites y tras necesitar una maniobra extraordinaria para que la Junta de Gobierno Local lo aprobara en primera instancia tras el rechazo del Pleno.

La inclusión en las cuentas de un ingreso de 9,8 millones de euros, provenientes de la presunta venta del módulo destinado a hotel en la Tribuna del estadio Ramón de Carranza dejará hoy en punto muerto la aprobación definitiva del Presupuesto. El Grupo Municipal Socialista anunció ayer , en palabras de su portavoz, Fran González, que votará a favor de las alegaciones presentadas por PP y Ciudadanos. Ambas formaciones solicitaron en sus reclamaciones, que serán tratadas hoy, que se eliminaran las partidas que se verían afectadas por el dinero que se prevé obtener de la enajenación de ese módulo del Carranza.

En el debate, que se celebrará a las 11.30 horas, se volverá a evidenciar que el Gobierno municipal depende de la oposición, especialmente del PSOE, para sacar adelante sus propuestas, no habiendo encontrado el consenso después de un año, como se ha vuelto a demostrar tanto en la negociación de estos presupuestos como en los últimos datos sobre la deuda.

El apoyo a las alegaciones del PP y Ciudadanos se adopta, según González, por "ser consecuentes" con la postura mantenida en los diferentes encuentros para intentar llegar a un acuerdo sobre las cuentas municipales, en los que "nosotros hicimos una serie de consideraciones que el equipo de Gobierno no tuvo en cuenta".

A estas dudas generadas por la partida de ingresos de 9,8 millones se unió ayer la derivada del escrito que registró el PSOE dirigido al interventor municipal sobre una sentencia del Tribunal Constitucional del 9 de junio de 2016 en la que se declara la inconstitucionalidad de la disposición adicional 16 de la Ley de Bases de Régimen Local, que permite la posibilidad de aprobar los presupuestos municipales en Junta de Gobierno Local de manera excepcional si éstos son rechazados por el Pleno y estaban prorrogados. Un dictamen que no es retroactivo con los procesos que ya se han finalizado, pero que deja en el aire aquellos que no se han finiquitado, como es el caso de Cádiz.

El portavoz del Grupo Municipal Socialista, Fran González, explicó ayer en rueda de prensa que con esta petición se insta "tanto al interventor como al secretario general a que se posicionen y que aclaren de la conveniencia o no de mantener el proceso tal cual lo ha llevado este equipo de Gobierno". Una solicitud para, según González, "acreditar que la aprobación definitiva no concurra ni vulnere ningún tipo de precepto" a partir de lo que dicta dicha sentencia del Tribunal Constitucional.

González subrayó los problemas que han existido para intentar llegar a un acuerdo sobre los presupuestos de 2016, ya que aseguró que el equipo de Gobierno "tropieza permanentemente ante la incapacidad de entenderse con nadie".

Pese a estas noticias que llegaban desde la oposición, el alcalde, José María González Santos, se mostraba ayer confiado en que los presupuestos puedan salir definitivamente adelante. En este sentido, indicó que si el Pleno vuelve a tumbar el presupuesto, será aprobado en última instancia en Junta de Gobierno Local "en base a la legalidad". E incluso ante el seguro apoyo del Pleno a las alegaciones presentadas por PP y Ciudadanos, que eliminarían del presupuesto 10 millones de euros de ingresos, González veía ayer posible "buscar la manera de asumirlas sin reformar los presupuestos". Un extremo que no llegó a concretar.

Rechazó el regidor la posibilidad de que las alegaciones y la aprobación definitiva del documento económico se realizara en Junta de Gobierno Local sin volver a pasar por el Pleno, como había planteado el PP. "No aprobarlo en Pleno implica caer en una ilegalidad manifiesta", dijo el alcalde en referencia a su elevación a la sesión que se celebra hoy. Además, se mostró sorprendido por el planteamiento que desde el PP defendió José Blas Fernández, "que no le pega porque lleva muchos años presente en lo público, o lo ha hecho con mala intención".

Y ante la situación generada, González Santos lamentó los obstáculos que nuevamente encuentran los presupuestos para sacarlos adelante, y se mostró especialmente crítico con los socialistas, que con su apoyo hoy a PP y Ciudadanos "deja clara su postura en la ciudad: apoyó la investidura y no deja de poner trabas a la labor de gobierno". "Votó en contra del presupuesto y luego no presenta ninguna alegación. Eso se puede llamar de muchas maneras, pero no colaboración desde luego", criticó el alcalde, que defendió la necesidad de que la ciudad cuente ya con unos presupuestos definitivos.