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Cádiz

A prisión por engañar a menores en internet para practicar sexo

  • El joven, que actuó en Cádiz y otras ciudades y abusó de varias víctimas, pacta 68 años de cárcel

La Audiencia Provincial de Sevilla ha condenado a un joven de 26 años natural de Arahal (Sevilla) que contactó por internet con hasta cien menores de edad, la mayoría de ellos residentes en Cádiz, para mantener sexo on-line con ellos. El procesado, que reconoció los hechos, se valió de una red social, tuenti, donde había creado un perfil falso de una chica de 16 años para propiciar los encuentros.

Por estos hechos el tribunal de la Sección Tercera ha condenado a este joven a ocho años de prisión por un delito continuado de corrupción de menores, una pena a la que hay que sumar 60 años más, 10 por cada uno de los seis delitos de abusos sexuales continuados que cometió contra otros niños menores de 13 años.

En total, el procesado se enfrenta a 68 años de prisión, si bien cumplirá como máximo 20 años de cárcel conforme a la ley que dicta que sólo podrá permanecer recluido como máximo el triple de la pena más alta en la que haya incurrido "y que no podrá exceder de 20 años".

En esta causa también ha resultado condenado otro hombre de 32 años natural de Madrid como cooperador necesario de un delito de abusos sexuales y por otro delito de abusos sexual. En total, le ha sido impuesta la pena de diez años de cárcel.

Las citadas infracciones y "la participación que en ellas tuvieron ambos procesados resultó acreditada por el reconocimiento expreso, explícito y sin fisuras que han realizado en el acto del juicio oral", mostrando además su absoluta conformidad con la calificación del fiscal y la acusación particular, a la que se adhirieron sus defensas.

La sentencia recoge como hechos probados que entre los meses de septiembre a diciembre de 2012 el primer procesado invitó a su domicilio -en Arahal- a varios menores. Allí conectaba la web cam de su ordenador, donde parecía mantener una conversación con una chica de 16 años, resultando ser en realidad el segundo procesado. Éste, haciendo creer a los menores que era una joven con interés sexual en ellos, les daba instrucciones a estos de los actos que debían realizar, todos de índole sexual.

Siguiendo estas normas, el condenado de Sevilla abusó sexualmente de los jóvenes, todos con menos de 13 años, en repetidas ocasiones. "Ellos pensaban que todo lo hacían para satisfacer a una chica también menor de edad, y sin lo cual, no hubiesen accedido a ello", puntualiza la sentencia. Posteriormente, los procesados compartían los vídeos que previamente habían grabado.

La resolución judicial explica que en esas mismas fechas de finales de 2012, el joven de Arahal empleó la red social tuenti para contactar con hasta cien menores, la mayoría de Cádiz, y proponerles practicar sexo on line usando para ello un perfil falso de chica. Una vez se comunicaba con los afectados -de entre 11 y 15 años- les invitaba a que encendiesen la web cam y practicasen sexo, bien en solitario bien en compañía de otros amigos. Una vez que conseguía las imágenes, las copiaba en distintos cd's que almacenaba en su casa.

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