Cádiz

La familia que emprende unida...

  • Los hermanos Pérez Arana dirigen desde hace años varios negocios en Cádiz

Hermanos, gaditanos y emprendedores. Esta ecuación no suele ser frecuente en nuestra ciudad, pero Francisco y Alejandro Pérez Arana son la excepción que confirma la regla. Junto a su hermano mayor, Gonzalo, son propietarios de Marpe, S.L., una empresa que engloba una constructora, un negocio que ofrece servicios de limpieza y una gestoría. 

Además, Francisco y Alejandro regentan desde agosto del año pasado la arrocería conBulli junto a Víctor Olmo. Todo un logro para unos jóvenes que han encontrado en una ciudad tan limitada como Cádiz recursos para crear empleo.

 

Francisco es Ingeniero Industrial y su hermano Alejandro Ingeniero Informático. El primero decidió hace 14 años, "para tener unos ingresos extras", montar una empresa de mantenimientos integrales y obras. "Era una manera de tener contactos, por eso al poco tiempo y viendo las necesidades de algunas comunidades de vecinos, decidí crear un nuevo negocio dedicado a la limpieza de edificios, empresas, etc". 

 

Al poco tiempo su hermano Alejandro comenzó a trabajar con él y más tarde unificaron ambas empresas. Se creó Marpe, S.L. y Alejandro entró a formar parte como socio hace unos ocho años. Gonzalo se convirtió en socio también hace cuatro años.

 

Por si esto no fuera poco, tanto Francisco como Alejandro decidieron abrir, junto a su socio Vítor Olmo, la arrocería conBulli, un local ubicado en la avenida Amílcar Barca. "Eso fue en parte por mí, porque siempre había trabajado en la hostelería y tenía le espinita clavada de montar algo en este sector", relata Alejandro.

 

En Marpe dirigen a una plantilla de 50 personas y en el restaurante son ocho en total. El secreto de llevar negocios diferentes y mantenerse a pesar de la crisis estriba, según Francisco, "en diversificar, no centrarte en un solo cliente ni en un único trabajo".

 

Se muestran orgullosos de no haber hecho "ni un ERE ni un ERTE y de haber contado con la ayuda de los trabajadores y de dos de nuestros proveedores en los momentos difíciles". 

 

Conscientes de las limitaciones que impone una ciudad como Cádiz, su próximo paso está encaminado a montar una sede de Marpe en Sevilla.

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