Una avenida flanqueada por tapias de ladrillo, sin apenas aceras para los peatones, sin ningún mobiliario urbano y del todo desaconsejable para pasear. La Carretera Industrial fue durante muchos años una vía rápida para salir de la ciudad sin pasar por la ciudad. Y con la expansión de extramuros, la construcción de nuevos barrios como Astilleros, el soterramiento del tren, la apertura de nuevas avenidas como la Juan Carlos I o la de la Bahía es prácticamente el único 'trozo' de la ciudad que se ha quedado completamente enquistado, paralizado en el tiempo. "Está igual que cuando yo era pequeño", comenta al respecto un veterano concejal respecto a este tema.

Pero frente a un pasado y un presente prácticamente intactos, parece haber llegado la hora de la Carretera Industrial. Casi de repente, buena parte de los proyectos que distintas administraciones están contemplando o concretando para la ciudad se sitúan en el entorno de la red ferroviaria, dejando adivinar una profunda transformación en toda esta zona para convertirlo en un acceso más atractivo al centro de la ciudad y con más servicios y equipamientos en el kilómetro que comprende esta Avenida de Astilleros.

Muro junto al tren

Es una de las actuaciones que se esperan más inminentes en esa zona y que significará el primer gran cambio de la Carretera Industrial. Adif va a destinar más de 230.000 euros para derribar el muro colindante con las vías del tren en toda la Avenida de Astilleros y retranquear el nuevo cerramiento, que será a base de postes tubulares de acero (similares a los ya existentes en el lado ferroviario más próximo a la plaza de Sevilla, que se instalaron recientemente).

Esta actuación está ahora pendiente de conocer las ofertas cuyo plazo precisamente finalizaba el pasado viernes, siendo las previsiones iniciar las obras, que tienen un plazo de ejecución de cuatro meses, en noviembre.

Estación de autobuses

Es otra de las actuaciones inminentes en la Avenida de Astilleros. La Junta de Andalucía ha informado al respecto que se está pendiente únicamente de un permiso que tiene que dar Adif relacionado con la seguridad durante las obras -al ser colindantes a la zona de actividad ferroviaria- para iniciar los trabajos. Algo que se espera sea solo cuestión de días, por lo que en las próximas semanas debe comenzar la construcción de la más que necesaria estación de autobuses.

El proyecto, conviene recordar, está dotado con un total de 2,8 millones de euros y será la empresa Dragados la que lleve a cabo las obras, que tienen un plazo de ejecución de diez meses (lo que quiere decir que en el verano de 2015 podría entrar en funcionamiento la nueva estación). La estación, sobre una parcela de 4.160 metros cuadrados colindante con la actual tapia de la Avenida de Astilleros, contará con ocho dársenas para autobuses convencionales y dos más para articulados, además de los servicios propios de una estación (andenes, sala de espera, taquillas, sala de control, aseos, consigna, área de hotelería...); y estará conectada con la estación de tren de Adif.

Gasolinera

Es otro de los proyectos que mejor ritmo lleva actualmente para ponerse en marcha en poco margen de tiempo. Adif, que lidera este proyecto, anuncia que el Ayuntamiento ya está tramitando el documento definitivo para su aprobación. Además, se precisa que están también pendientes de las acometidas de agua y de luz para esa parcela (próxima a la rotonda de Bomberos).

El precio de licitación para la enajenación de esta parcela de 546 metros cuadrados sobre la que se levantará una nueva gasolinera en la ciudad (que se convertirá en la número 11, además del surtidor de la sede de Radio Taxi) es de 726.000 euros, a los que habrá que sumar la inversión propia para la construcción y puesta en funcionamiento de la estación de servicio.

Subterráneo

Mucho trabajo le está suponiendo al Ayuntamiento y a su empresa municipal de aparcamientos, Emasa, sacar adelante este proyecto de habilitar un aparcamiento subterráneo bajo la Carretera Industrial. Desde hace años se viene trabajando en este plan y todavía hoy se comunica que sigue la negociación con varias entidades financieras para sacar adelante el proyecto. Por tanto, aún no hay nada definitivo al respecto, aunque desde Emasa se asegura que "estamos decididos" a construir este aparcamiento. Precisamente, su presidente José Blas Fernández destaca que precisamente ahora, con el avance y llegada de nuevos proyectos en el entorno de la Avenida de Astilleros (como la estación de autobuses o la eliminación del aparcamiento actual de Adif, además del segundo puente) el aparcamiento cobra más interés e importancia si cabe.

Conviene recordar que se trataría de una primera fase del estacionamiento, que transcurrirá aproximadamente entre la puerta de acceso a los astilleros gaditanos y el edificio que hay junto a la Casa del Mar. En ese terreno se habilitará un estacionamiento en una sola planta y con capacidad para alrededor de 250 vehículos, todo ello con un presupuesto de partida de unos 4,8 millones de euros.

Estación vieja

Ha sido el último proyecto ideado para esa zona. Hace tan solo unos días Adif anunciaba su plan de convertir la antigua estación ferroviaria, construida en 1905, en un mercado gastronómico donde convivirán restauración (ya sea de comida tradicional, de los denominados fast foods o de comida tematizada, entre un sinfín de posibilidades), venta de productos frescos con formato de mercado tradicional y puntos de venta y degustación de productos gourmet. Para ello, se dispone de un total de 5.500 metros cuadrados.

Actualmente, este proyecto se encuentra en fase de licitación, esperándose las ofertas de interesados hasta el próximo 3 de octubre, con un precio mínimo de 2.075.201 euros (sin IVA, en concepto de arrendamiento del edificio durante los próximos quince años). Habrá que esperar, por tanto, al resultado de este concurso para saber si al fin la vieja estación de tren logra tener actividad en su interior.

Túnel de contenedores

Es el proyecto más ambicioso y, a su vez, el que quizá menos incidencia tenga una vez salga adelante con respecto al entorno de la Avenida de Astilleros. Se trata del acceso subterráneo a la futura terminal de contenedores del puerto de Cádiz. El túnel, que partirá de la rotonda de bomberos, recorrerá 1.308 metros (890 bajo tierra) la mayoría de ellos en suelo portuario para conectar directamente el tráfico con el muelle de contenedores. El montante de esta inversión, pendiente de la aprobación definitiva del Estado para poder iniciarse, alcanza los 34.165.429 euros.

Unida de alguna forma a esta estaría otra importante actuación en la zona: el acceso ferroviario que conectaría esa terminal de contenedores con el suelo de Renfe y que, por tanto, exige que cruce la Avenida de Astilleros (aunque en principio ese tráfico parece que se reduciría a un solo tren al día, y al ser posible durante las horas de menos tráfico en la Carretera Industrial).

Una vez se derribe el actual muro y se construya el nuevo, con el correspondiente retranqueo; y cuando se proceda a construir el aparcamiento subterráneo vendrá consigo también la reurbanización de la Avenida de Astilleros propiamente dicha, que buscará una mayor comodidad tanto para el tráfico (contará con dos carriles de circulación en cada sentido) como para el peatón (que tendrá una zona más amplia para su tránsito). Esto corresponderá al Ayuntamiento, y de alguna forma puede considerarse la guinda de un pastel al que aún puede que le falten algunos ingredientes que se conocerán en próximos meses -como, por ejemplo, una pastilla de 3.348 metros cuadrados que Adif no consigue enajenar y para la que buscaba la construcción de un edificio de oficinas y locales comerciales- y cuya inversión global mínima, sumando los costes de cada uno de los proyectos ya enfilados, ronda ya los 45 millones de euros.