Un clásico que no estará en las próximas elecciones municipales al frente de su partido. Precisamente esa es una de las razones que han llevado a Sebastián Terrada, portavoz del Grupo Municipal de Izquierda Unida desde el año 2006, a no concurrir en el proceso de primarias que se ha abierto en su formación y que concluye el lunes con el final del plazo de presentación de candidaturas. Terrada no quiere perpetuarse en los sitios y pone el ejemplo de los 20 años que lleva la alcaldesa Teófila Martínez al frente de la ciudad.

Terrada sustituyó a mitad del mandato situado entre 2003 y 2007 a Gervasio Hernández Palomeque, que entonces era el único concejal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento. En el año 2007 ya fue cabeza de lista y aguantó el escaño hasta la mejora de resultados de 2011, donde alcanzaron los tres ediles y fue la única formación que creció.

Terrada dijo ayer en una rueda de prensa que hace meses que ya comunicó a la dirección provincial su intención de no seguir aunque no ha sido hasta ahora cuando ya la ha convertido en definitiva.

No sólo el paso de los años ha hecho mella en el edil izquierdista, sino también argumentó ayer que había motivos personales pero, en cualquier caso, señaló que había tomado "una decisión acertada" y como añadió, "meditada".

Terrada valoró de manera positiva los años al frente de IU en el Ayuntamiento de Cádiz en una plaza que calificó como "muy difícil", por la larga permanencia de la alcaldesa y por unos debates donde "prima el insulto". En este sentido, recuerda que el período entre 2007 y 2011 fue "especialmente duro". Pese a ello, guarda cariño de una época "en la que conseguimos ensanchar nuestro escaño". Sebastián Terrada afirma que se ha hecho "una política con mayúsculas con propuestas que han calado en la ciudadanía frente al chabacanismo y al insulto".

En cualquier caso dijo que agotará el mandato como portavoz y que después no va a retirarse de su compromiso social y político.

¿Y ahora qué? La renuncia de Terrada abre un nuevo escenario en Izquierda Unida donde el lunes se conocerá el nombre de los militantes que quieran participar en este proceso que estará no sólo abierto a los 60 afiliados, sino también a los simpatizantes que se registren.

De momento el nombre de Martín Vila, actual coordinador local de Izquierda Unida y asesor de Manuel Cárdenas (coordinador provincial) en la delegación provincial de Fomento y Vivienda de la Junta de Andalucía es uno de los que se da casi por seguro. El propio Vila ayer no quiso manifestarse en ningún sentido y por activa y por pasiva esquivó las preguntas de los periodistas sobre si se va a presentar o si hay ya alguna otra candidatura: "Queremos ser muy pulcros en este proceso para velar por la igualdad de oportunidades. Si se conocen unos nombres antes que otros la competencia no sería justa porque se puede interpretar que alguno tiene más tiempo para hacer campaña", indicó.

Otro de los que también ya se encuentra intentando movilizar a gente es David Moreno, trabajador en el Ayuntamiento de Cádiz, con el objetivo de concurrir a las primarias.

Otra de las incógnitas que se resolverá en los próximos meses es si Izquierda Unida concurre a las elecciones municipales bajo su marca o la de otra que aglutine a otros colectivos y partidos, incluido Podemos. Martín Vila dice que el objetivo principal es que "haya una convergencia social y política" con otros colectivos: "No vamos a negar la participación de nadie y si se produce esa convergencia, iremos con una marca que supera la propia de Izquierda Unida", un proceso que se está produciendo en otras ciudades y que ha recibido el nombre de Ganemos. "Si no se consigue, iremos como Izquierda Unida porque tenemos los deberes hechos".