Aunque de forma muy lenta, como ha sido la norma en casi todo el proceso de desarrollo del Plan de Sevilla, en los últimos meses por fin se están produciendo avances en una de las operaciones urbanísticas de mayor relevancia de la capital y que tendría que haber estado concluida en su conjunto hace una década. Esta es la situación en cada uno de los tramos:

Estación de autobuses interurbanos: Ocupará un solar en la avenida de Astilleros cerca de la rotonda del parque de Bomberos. La obra la financia la Junta y ya está adjudicada. Tiene un plazo de ejecución de un año.

Derribo muro de la estación: Adif ha puesto en marcha un concurso para retranquear el antiguo muro de Renfe que da a la avenida de Astilleros. Esta operación, que se ejecutará en los primeros meses del próximo año, permitirá la modificación de todos los servicios públicos subterráneos.

Gasolinera: Irá en una parcela junto a la estación de autobús que ha sido vendida por Adif. Las obras están pendiente de inicio.

Aparcamiento subterráneo (nueva avenida): Ambos proyectos dependen del Ayuntamiento y no hay fecha de inicio. En el primero de los casos, desde hace meses se viene anunciando el inicio inminente de las obras. Se esperaba que para este fin de semana se cerrase la financiación de este equipamiento. La nueva avenida tendrá cuatro carriles, dos en cada sentido, y suelo destinado al paso del tranvía metropolitano. Es una vía esencial para la conexión del puente de la Constitución con el casco antiguo de Cádiz, que se supone estará en funcionamiento a finales del 2015.

Equipamientos públicos: En las pastillas que dan a la zona portuaria de la avenida de Astilleros irán varios equipamientos públicos. Uno que ya está confirmado es la nueva comisaría de la Policía Nacional; también se supone que se ubicarán alli la Casa del Mar y las otras dependencias administrativas que serán derribadas con la reforma de la plaza de Sevilla.

Edificios privados: Se levantará en suelo propiedad de Adif, paralelo a la estación, en la misma avenida de Astilleros. La empresa pública ya lo ha sacado a concurso en dos ocasiones, con un coste de 9 millones de euros, sin lograr compradores. Los edificios tendrán limitado sus usos a oficinas y locales comerciales en los bajos.

Vestíbulo terminal férrea: La primera fase está terminada desde hace una década, con zona de venta de billetes y sala de espera de viajeros. Adif no la ha abierto al considerar que no hay un movimiento de clientes lo suficientemente grande como para hacer rentable este servicio. Una segunda fase suponía la construcción, sobre lo ya existente, de un hotel y una zona de ocio, operación que se supone nunca será viable.

Estación 1905: Aunque en el exterior ya se deja notar el paso del tiempo, el interior está rehabilitado y a la espera de que se le dé algún uso.

Parque de la Muralla: la zona verde ocupará el suelo donde hoy está la estación provisional del autobús interurbano y el aparcamiento en superficie que gestiona Adif. Se supone que cuando la Junta termine su estación se podrá abordar esta operación, que incluye la rehabilitación de la muralla de la Cuesta de las Calesas y del baluarte de Santa Elena.

Aparcamiento de Adif: En el frente y lateral de la estación de 1905, el Plan Plaza de Sevilla incluía un aparcamiento subterráneo construido por la empresa de ferrocarril. No hay fecha para que se ejecute esta obra.

Plaza de Sevilla: Cuando se ejecute la nueva avenida de Astilleros será necesario remodelar la plaza de Sevilla, al llegar a la misma, y salir, cuatro carriles. La permanencia del edificio de la Aduana y la erección de uno de los monumentos dedicados a la Constitución dificultan la ejecución del diseño inicial.