"La imagen molecular llegará a proporcionar soluciones concretas a dilemas que se siguen dando con el cáncer del mama", aseguró ayer el doctor Renato Valdés, del Netherland Cancer Institute, en el marco del XXXII Congreso de la Sociedad Española de Medicina Nuclear e Imagen Molecular (Semnim) que se celebra estos días en Cádiz. El especialista en la materia participó en una mesa redonda que puso de manifiesto que la técnica de la imagen molecular, basada en la localización o captación concreta del tumor, podrá personalizar aún más el tratamiento del cáncer de mama "y afinar en cada caso con más certezas". Asimismo "evitará procesos largos y podrá predecirse a largo plazo el pronóstico del paciente. A la larga mejorará la calidad de vida de los enfermos", según Valdés.

Añadió que "es posible dar una información precisa complementando a la morfológica, con la técnica estándar que es la mamografía. En ella existe una categoría de pacientes en los que no es posible sacar un diagnóstico conclusivo, y para ellos está la imagen molecular, una técnica que se está incorporando en los últimos años". En cuanto a los beneficios de la misma, el doctor Valdés recordó que en grupos de población examinados hay pacientes con anomalías no definidas como tumores pero que requieren seguimiento. Para ello, la información que proporcionaría la imagen molecular "podría excluir o verificar que fuera un tumor maligno".

Es época de recortes en sanidad, complicada para invertir en alta tecnología. La crisis es admitida por Valdés, pero agrega que aunque todavía no hay una aceptación general de esta técnica, "de haberla y de ser importante el número de pacientes, el coste de las máquinas bajaría. Ocurrió lo mismo hace años con la resonancia magnética, ya aceptada como modalidad diagnóstica, pero carísima entonces. Su uso masivo provocó que bajara su coste". La imagen molecular "localizaría tumores con más facilidad y se ahorraría en duración de tratamientos. Aunque parezcan inversiones caras, a la larga sería rentable".

La imagen molecular se está aplicando a determinados pacientes con cáncer, pero está en fase inicial de aprobación para el cáncer de mama. "Creemos que a la luz de los prometedores resultados acabará aceptándose", explicó Valdés.

Otro especialista como Sergi Vidal Sicart, del Hospital Clinic Provincial de Barcelona, manifesto que España, en cuanto al tratamiento del cáncer de mama "está en un nivel muy bueno, con técnicas incluso mejores de lo que pueda pensar la población. La tecnología española está jugando un gran papel. Las máquinas de imagen molecular son de fabricación española, en Valencia". Vidal afirmó que la esperanza de vida en el cáncer de mama "hay ido mejorando significativamente en España y el 70 por ciento de las personas tratadas logra salir adelante y vencer a la enfermedad".