Aunque el director en funciones de la RTVA, Joaquín Durán, negaba ante el Parlamento que Canal Sur hubiera contratado a Ausbanc para elaborar contenidos en la cadena, este asunto ya se ha cobrado una víctima: ni más ni menos que su contrapeso en la gestión de la cadena autonómica, el hasta ahora director de Estrategias y Antena, Antonio Ramírez, veterano director de informativos de la casa.

La aparición en el sumario de la trama Ausbanc, que investiga el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz, de un restaurante vinculado a la familia de Ramírez -el popular establecimiento Casa Salva, en pleno centro de Sevilla- ha sido la razón de una destitución fulminante que augura un terremoto político y empresarial en la cadena autonómica andaluza, justo cuando vive una grave crisis de credibilidad y audiencia. El consejo de administración de la RTVA ha sido convocado por vía de urgencia al reconocerse la gravedad de las informaciones que instalan al directivo en el negocio de Ausbanc.

Ramírez era el hombre de máxima confianza del Gobierno de la Junta de Andalucía en el seno de Canal Sur por su larga experiencia en el conocimiento de la casa y sus dotes de conexión con los sindicatos y, por lo tanto, con la plantilla.

Durán, que ha abierto una investigación interna que puede extenderse a otras productoras y directivos,  con la que se pretenderá "llegar hasta el fondo", tomó la determinación de prescindir de Ramírez a raíz de la publicación, ayer en la web El Confidencial Andaluz, de datos sobre la documentación del caso Ausbanc y Manos Limpias.

En la causa se refleja que el presidente de Ausbanc, Luis Pineda, mantuvo varias conversaciones en diciembre de 2015 con el delegado de su firma en Andalucía, José Marín Rodríguez, en las que éste le informaba que tenían que acudir al mencionado restaurante, por indicación de Ramírez, para hacer "dos facturas de 2.500 euros" en concepto de comidas y eventos. Ya por entonces se habían emitido en horarios intempestivos -con una audiencia exigua- dos proyectos audiovisuales vinculados a Pineda, las galas musicales de El club de la Vida buena (emitidas en agosto, de madrugada); y la serie documental Virgen extra, el oro de Andalucía, en febrero de este año, en horario matinal los fines de semana.

Entre ambos proyectos, a nombre de la firma Agroeditora S.L., de Luis Pineda, la RTVA pagó 135.000 euros, siendo Ramírez el máximo responsable de los contenidos. El director en funciones de la RTVA ha quedado en evidencia con su propia decisión, ya que en su momento defendió en el Parlamento que la contratación con la empresa de Pineda se hizo con transparencia, y con normalidad, y que se contrataron por ser formatos  "buenos y baratos" y "adecuados" a los objetivos marcados por la televisión pública andaluza, aunque después fueran emitidos casi a escondidas.

En el caso de las cuatro galas musicales, que Durán indicó que fueron contratadas a 15.000 euros cada una, se programaron en las noches del mes con menos consumo del año. Las galas llevaban patrocinios, pero el director interino de Canal Sur negó que existiera "publicidad encubierta".