"Una herencia de 300.000 euros es una señora herencia, no todos los ciudadanos la reciben y mucho menos las clases obreras y trabajadoras". El portavoz del Gobierno andaluz, Miguel Ángel Vázquez, hizo ayer esta reflexión para explicar que el Ejecutivo no está de acuerdo con la propuesta de Ciudadanos (C's) de elevar el mínimo exento del Impuesto de Sucesiones por encima de los 350.000 euros, si bien mantiene su compromiso de revisar el tributo dara conferirle una "dimensión más justa".

Vázquez insistió en el mensaje de que esa corrección está incluida en el programa electoral del PSOE y fue un compromiso de la presidenta de la Junta, Susana Díaz, en su investidura. Por el momento, el Ejecutivo está "trabajando en ello", dijo el portavoz. "Esa es nuestra tarea", añadió, sin dejar pasar la ocasión para subrayar que el Impuesto de Sucesiones produce unos ingresos a las arcas de la comunidad autónoma que no son "desdeñables".

En el Ejecutivo socialista "creemos que conviene revisarlo y mejorar el instrumento, que para nada es injusto, aunque queremos que sea aún más justo todavía", aseguró Vázquez, que rechazó que el tributo tenga un carácter "confiscatorio", pues el 93% de las herencias quedan exentas de tributación en Andalucía y solamente un 7% pagan. No obstante, el portavoz recalcó que hay que "corregirlo" tras admitir que el "salto" de 175.000 euros en adelante es "excesivo", por lo que se va a modular para que sea "progresivo".

Vázquez, que rechazó que se haya producido un enfriamiento de las relaciones PSOE-C's debido entre otras razones a sus discrepancias sobre este impuesto, cargó contra la campaña del PP para recoger 200.000 firmas que pidan la bonificación al 99% de este tributo. "Hay que echarse a temblar porque [el PP] le da palos a los avisperos" cada vez que promueve una iniciativa de estas características, a juicio del portavoz del Gobierno. Vázquez interpeló al primer partido de la oposición sobre cómo pretende conseguir los ingresos que se dejarían de recibir con esa iniciativa, sobre todo cuando sigue vigente un sistema de financiación autonómica, "por deseo expreso de Mariano Rajoy", que "perjudica notablemente" a Andalucía, pues le "produce una merma al año de mil millones de euros.