Juan Manuel Moreno Bonilla. Presidente del PP de Andalucía

"No tengo ningún miedo a presiones ni injerencias desde el partido o Moncloa"

  • Un mes después de sufrir un duro golpe en las urnas, el líder del PP considera que Susana Díaz está cada día más sola.

-¿Ha asumido ya el resultado electoral?

-Sí, lo asumí aquella misma noche cuando llamé y felicité a Susana Díaz. Los días siguientes han sido de reflexión, de análisis. De asumir los resultados.

-¿Qué le sorprendió más, la caída del PP, que el PSOE aguantase, la irrupción de Ciudadanos o que Podemos se quedase en 15?

-Me ha sorprendido un poco todo. Ha sido un panorama político insólito en Andalucía. Ha habido una caída del PP que todos augurábamos fruto del desgaste de las siglas, pero no esperaba que otras fuerzas que son de nueva creación alcanzasen esos resultados. Ciudadanos ha conseguido nueve escaños; yo pensaba siempre que iban a estar entre los tres y los cuatro. Pero han logrado nueve escaños y muy en el ámbito electoral e ideológico del PP.

-¿Ahí han podido influir afirmaciones y descalificaciones como las de Antonio Sanz o Rafael Hernando?

-Creo que en campaña siempre hay comentarios y frases desafortunadas. Pueden haber hecho daño, pero al final había una parte de nuestro electorado que estaba disgustado y quería castigar al PP. Tradicionalmente ese castigo era la abstención, que también se ha dado, pero ahora han encontrado una nueva fórmula que, sin saltarse la adscripción ideológica, pudiera castigar al PP.

-¿Entonces no hay un culpable en el PP?

-Culpables somos todos. En primer lugar, yo que soy el candidato; los ocho presidentes provinciales; la dirección del partido; todo el PP nacional. Todo un proyecto político que está bajo unas siglas que a veces, como pasó hace cuatro años, se ha subido a una ola que aupó a muchos candidatos y que ahora está en una ola más complicada. Uno tiene que estar a las duras y a las maduras.

-¿Le perjudicó la reiterada presencia de Rajoy en campaña?

-Estoy convencido de que no. Primero, Rajoy es el presidente de España y Andalucía es parte de España. Segundo, es el presidente de mi partido. Y tercero, yo era un candidato novel. Cuando disuelve el Parlamento, la señora Díaz lo hace pensando en el mejor momento para ella y el peor para mí que solo llevo diez meses en el partido. Con esta situación él viene a apoyar, a movilizar y a tensionar a nuestras bases. En definitiva, creo que al final no perjudica.

-¿Cambiaría algo de lo que hizo?

-Sinceramente creo que hicimos una campaña razonable, en positivo, con propuestas, novedosa y con cierto toque de modernidad y frescura. Así me lo ha dicho mucha gente y la opinión publicada. Pero sí creo que hay cosas mejorables, creo que iría a sitios adonde no he ido, me reuniría con otros sectores... Siempre hay mucho margen para la mejora. Pero básicamente nos ha faltado tiempo.

-¿Entre esas mejoras está la de la imagen del PP en el ámbito rural?

-Sin duda alguna. Ésa es la gran asignatura pendiente de los 33 años de Gobierno socialista. No hemos conseguido calar en zonas rurales; se ha avanzado mucho, pero he estado repasando los datos y donde nos pegan la paliza es en los municipios de menos de 15.000 habitantes. Por eso yo me voy a volcar allí en la campaña de las municipales, voy a hacer cambios en la estructura para reforzar esos municipios y en los próximos años me voy a dedicar en gran medida a eso. Debemos convencer a un sector que nos ve como una amenaza y no como una oportunidad.

-¿Qué cambios son esos?

-Quiero crear una oficina regional de municipios rurales. Quiero tener una agenda permanente de los líderes andaluces en las zonas rurales. Quiero que estudiemos cuál es el mensaje, qué es lo que quieren de nosotros. Y, en tercer lugar, que analicemos los códigos de comunicación porque está claro que los de ahora llegan a las zonas urbanas pero no a las rurales.

-¿Va a remodelar su equipo, que ha sido criticado por corto y poco plural con las sensibilidades dentro del partido?

-Me gustaría que esas voces críticas tuvieran nombres y apellidos. Saber quiénes son. Me he reunido con los órganos en las ocho provincias y nunca me han dicho lo que me dice usted. Siempre estoy receptivo y sensible a cualquier reivindicación, pero las provincias están perfectamente representadas. Hice un esfuerzo para tener ocho vicesecretarios. Creo que eso es más fuego de artificio e interés mediático porque en las ocho provincias he visto mucho cariño y apoyo de las bases.

-Quien sí tiene nombre y apellidos es Esperanza Aguirre, ¿ha hablado con ella después de lo que dijo?

-No hablé con ella. Creo que se sacó algo de contexto lo que dijo, pero también digo que estuvo desafortunada. Creo que entre compañeros hay que tener fair play. Yo nunca me alegraré ni criticaré sin sosiego y sin serenidad a un compañero por sus resultados al día siguiente. Sobre todo sabiendo por el momento político que estamos pasando, que es uno de los peores momentos del PP en los últimos años. Probablemente de los últimos diez años.

-No hemos salido de unas elecciones y ya estamos en otras, las municipales, ¿cuál es su previsión para Andalucía?

-Es evidente que el PP no va a sacar los resultados de 2011, estamos en otro momento político. Sin embargo, creo que la gran fortaleza del PP reside en los municipios y siempre hemos sacado los mejores resultados en las municipales y además tenemos grandes alcaldes que han sembrado y cuando tú siembras recoges. Las municipales tienen otras características más cercanas, más personal, más identificadas con el candidato a alcalde y estoy convencido de que vamos a mantener gran parte de nuestras referencias de gobierno en las capitales de provincia y en los grandes municipios.

-¿Cree que el resultado será mejor que para el resto de España?

-Es difícil porque al final las municipales son nacionales y se celebran el mismo día. Hay mucho contagio de política nacional, que condiciona y mediatiza. Después de este año me he convertido en una persona muy prudente a la hora de vaticinar resultados. Estamos en un momento difícil con la aparición de muchas fuerzas políticas nuevas, en el ámbito municipal también nuevas formaciones locales. No sé cuál será el resultado.

-Habla de mantener gran parte de sus resultados, ¿cómo se traduce eso en capitales?

-Soy muy optimista. Creo que vamos a ganar en las ocho capitales, en Jerez, Algeciras y Marbella, por citar otras grandes ciudades, y vamos a mantener gran parte de esas capitales.

-¿Y las diputaciones?

-Esas son más difíciles porque dependen del voto indirecto y eso tiene una enorme dificultad vaticinarlo. Depende mucho del resultado de algunas comarcas que son definitivas. Las diputaciones son complejas de mantener. Esperemos mantener el máximo posible.

-¿Se juega usted su futuro en el partido en las municipales?

-No, sin duda no. Ya he dicho que esto es un proyecto a medio y largo plazo. Sería ingenuo el que piense que voy a acabar con 33 años de socialismo en un año. Una de dos, o es una gran dosis de ingenuidad o lo es de mala intención. Es evidente que en un año no se puede lograr lo que no se ha conseguido en 33. Yo tengo que hacer mi propia travesía del desierto. Eso lo tengo que hacer con trabajo, tesón, con los mejores equipos posibles y haciendo el PP andaluz del siglo XXI.

-¿Y Rajoy se juega su futuro?

-Estoy convencido de que no porque el resultado va a ser bueno en líneas generales. No va a ser el de 2011 pero será mejor. Rajoy está muy consolidado, yo he estado en muchas reuniones y no he oído a nadie cuestionarlo. Ha conseguido el mejor resultado del centroderecha en la historia y ha sabido sacar a España de una gravísima situación de crisis.

-Pero hay una opinión publicada que apunta a su amigo Alberto Núñez Feijoó como sustituto...

-Alberto es probablemente uno de los dirigentes políticos del PP -hay muchos-, capaces, sensatos, eficaces con una gestión probada, que son personas de referencia dentro del PP. Pero yo en las conversaciones que he mantenido con él he visto que tiene un compromiso claro con Galicia.

-¿Cree que Ciudadanos tendrá el mismo efecto sobre el PP en las municipales del que tuvo sobre las andaluzas?

-Creo que no. Por varias razones. Es verdad que ha entrado, está de moda, es un partido de corte muy personal, del señor Rivera, que ha tenido el mérito de ilusionar a miles de personas. Desde el máximo respeto, y a pesar de que están de moda, pienso que una cosa son las autonómicas y otra las municipales. En estas pesan los candidatos que se presentan y hay algunos que ellos llevan que no representan lo que los ciudadanos están reclamando.

-Volviendo al resultado de las andaluzas, ¿va usted a dejar pasar a Susana Díaz con la abstención de su grupo?

-La pregunta habría que hacérsela a ella: ¿va a dejar pasar ella los dos meses y nos vamos a ir a unas elecciones? Ella ha ganado y los ciudadanos me han puesto a mi en la oposición. Ella tiene tres fuerzas para permitir su investidura y lo que tiene que hacer es capear. Lo que pasa es que eso es difícil porque Susana Díaz representa la vieja escuela socialista del yo mando, ordeno e impongo. Hay muy poco diálogo porque no saber ceder y lo ha demostrado en la Mesa del Parlamento. Ella debe cambiar mucho si quiere ser investida. Yo voy a hacer lo que los ciudadanos me han pedido, ser alternativa y oposición.

-Por lo que dice, Susana Díaz podría estar forzando la máquina para dejarle en mal lugar, convocar en septiembre y lograr un mejor resultado...

-Si lo hace creo que cometería un gravísimo error. Si ella quiere unas nuevas elecciones el PP está preparado, nuestra máquina está engrasada. No le tengo ningún miedo. Ahora, yo en su lugar me lo pensaría porque en lugar de sacar 47 podría sacar 41 o 40.

-Entonces, ¿cree que que lo está pensando?

-Podría ser, porque la señora Díaz solo piensa en ella, en ella y en ella. A lo mejor está pensando que le interesa otro proceso electoral.

-¿Qué le haría falta al PP para abstenerse en la investidura además del acuerdo de respeto a la lista más votada el 24-M?

-Hay más. El PSOE nos trasladó el principio de que hay que respetar la lista más votada a pesar de que hace tres años no lo cumplió y Susana Díaz, como secretaria de Organización, pactó con IU para que no gobernásemos. El PP siempre ha defendido que gobierne la lista más votada, pero eso vale el 22-M y el 24-M. Lo que pido es un compromiso para respetar eso. De hecho, yo respeto ese compromiso porque no he hecho ningún movimiento con otros partidos ni lo voy a hacer. Hay otros compromisos que exigimos como nuestra reforma fiscal, un plan de empleo, una reforma de los servicios básicos de los andaluces, un plan para poner transparencia a la corrupción con una comisión de investigación de los cursos de formación. No hemos tenido ninguna respuesta.

-¿Y no teme una llamada de Madrid que le obligue a abstenerse?

-No, porque el ámbito de decisión es el de aquí. Yo soy responsable de la estrategia política que se marca para lo bueno y para lo malo. Eso significa que las decisiones se toman aquí. Otra cosa es que yo pueda hablar y consultar con otros dirigentes. Pero el presidente Rajoy siempre se ha mostrado muy respetuoso con el ámbito de decisión de Andalucía. No tengo ningún miedo a injerencias ni presiones ni desde la dirección nacional ni desde Moncloa.

-La imagen del día de la constitución del Parlamento con dos diputados suyos enfrentados a voces con el presidente de la Mesa de Edad es lo que habría que desterrar de la política...

-Es lo que buscaba el PSOE. Habríamos tardado 15 minutos en llegar a un acuerdo. No es una cuestión de cargos es que allí se decide, por ejemplo, si se le pide a la señora Díaz que comparezca para hablar de corrupción. La mesa es fundamental para la marcha del Parlamento y ellos se han sacado de la manga una cuasi mayoría absoluta. PSOE e IU tienen mayoría en la mesa, pero no en la Cámara. Han hecho un rodillo con la connivencia del letrado del Parlamento y se ha hecho un flaco favor al Parlamento y a la gobernabilidad de Andalucía. Me llama la atención que nos pidan que dejemos pasar a la señora Díaz y el PSOE mande a dos hooligans a negociar, nos pegan tres patadas en la espinilla, nos insultan, nos vapulean, nos imponen su decisión y luego nos dicen que seamos responsables. Ya está bien de que nos tomen el pelo al PP y a los ciudadanos andaluces.

-¿Qué le parece el nombramiento de Juan Pablo Durán como presidente de la Cámara?

-Creo que es mejorable, que entre los socialistas hay diputados que me parece que jugarían un papel más neutral e institucional. Ahí se demuestra lo que busca la señora Díaz, a la que cuando le pides diálogo te responde con bronca y confrontación. Busque un presidente aceptable, no uno que ha tenido que pagar una sanción por su gestión en Cajasur con la que ya tiene una sombra de duda sobre su capacidad. Y después, elige a un señor que hizo un comentario absolutamente, no ya inoportuno, sino una aberración democrática cuando dijo que los del PP solo sabemos matar. Poner a un señor que dice estas cosas no es buscar un consenso ni una fórmula en la que todos nos sintamos cómodos.

-¿Teme que se utilice la sucesión de plenos de investidura como arma contra el PP ante el 24-M?

-No lo creo porque cada vez que hay uno es la señora Díaz la que pierde. Queda en evidencia que ese paseíllo triunfal del 22-M se ha demostrado que no era tan exitoso; que la señora Díaz, en un mal momento del PP, ha sacado un peor resultado que el supuesto peor candidato de su partido, el señor Griñán. Ha sacado el peor resultado de la historia. Cada pleno se demuestra que está sola, orillada. Cuando cuatro fuerzas Políticas no la apoyan es porque no se fían de ella y ese es su problema, que nadie se fía de ella.

-¿Qué le parece el anuncio de Griñán de que se retira de la política?

-Que se comporta como un buen afiliado del PSOE. Está intentando facilitar la investidura de la señora Díaz, pero tendría que haber renunciado hace bastante tiempo. Se ha visto en una situación límite e imposible y por eso ha dado el paso atrás. Esperemos que el señor Chaves también lo haga.

-¿Y las declaraciones de los aforados ante el Supremo y el TSJA por el caso de los ERE?

-Eso es bochornoso para Andalucía. Un paseíllo judicial por el que pasa todo un consejo de gobierno demuestra qué situación hemos vivido en nuestra tierra. Eso acrecienta una imagen mala para Andalucía y que nos hace daño. No me alegro de que pasen por la Justicia, creo que es malo para Andalucía. De lo que me alegro es de que la Justicia actúe. Por cierto, algún día alguien deberá devolver ese dinero y deberemos saber dónde están esos fondos perdidos.

El impacto de Rato es una mala noticia para el PP

-¿Debería Rajoy comparecer para aclarar el caso Rato?

-Ya ha comparecido en la sesión de control.

-Me refiero monográficamente.

-Hay una diferencia: hablábamos de Chaves y Griñán, que tienen actas de diputado y senador y son militantes del PSOE. Rato no es militante y estas actividades que supuestamente ha cometido las ha hecho en su vida privada. Ha habido una colaboración total para que la Fiscalía pueda investigar, algo muy distinto a lo que ha pasado en Andalucía, donde a la juez Alaya se la ha criminalizado todos los días y se le han puesto palos en las ruedas. Creo que todos los casos de corrupción son lamentables y, hasta lo que yo sé, por lo poco que he visto con las tarjetas black me ha decepcionado muy profundamente. Es absolutamente lamentable, no sé hasta dónde puede llegar la codicia humana.

-¿Hay que publicar la lista de quienes se han acogido a la amnistía fiscal?

-Eso es un delito. Yo no lo haría porque me llevarían a los tribunales. El PSOE no lo hizo y ahora pide que lo haga el PP. Hay que tener sentido común y coherencia.

-Este caso es la gota que faltaba para terminar de machacar la imagen del PP...

-Positivo no es. Estamos hablando de un señor que lleva fuera de la vida pública más de una década y no es militante, pero es verdad que afecta al PP. Positivo para la campaña, tampoco, y espero que los ciudadanos sepan diferenciar el grano de la paja entre las decenas de miles de cargos que ni cobran y los chorizos.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios