PP, PSOE e IU intentaron explicar ayer las razones por las que han incluido entre una batería de medidas para fomentar la transparencia y la participación en el Parlamento la modificación del artículo 20 del Reglamento por la que restringen las posibilidades para formar nuevos grupos parlamentarios. Desde 1982 existían las opciones de formar grupo con cinco diputados o bien con tres diputados y el 5% de los votos en el conjunto de la región, segunda acepción que los partidos han borrado ahora del articulado.

Aunque una explicación sobre el acuerdo sería que el panorama electoral apunta a una dispersión del voto en las próximas elecciones autonómicas que dibujaría un Parlamento atomizado y plural, con más fuerzas políticas presentes que en la actualidad, ninguno de los partidos con representación en la Cámara se adscribe a esta opinión y, pese a que el acuerdo se cerró por unanimidad, las versiones para explicar por qué se suprime esta posibilidad difieren.

A preguntas de los periodistas, la versión del portavoz del PP-A, Carlos Rojas, fue la que más se acercó a la dispersión del voto. Para Rojas, esta reforma se hace para dar "estabilidad" a la institución "y no para evitar nada". Para el PP un grupo de tres diputados no puede contar igual que uno de 30, con los mismos derechos, y por ello apoyaron que se eleve la barrera para formar grupo.

Sobre las críticas ciudadanas y de partidos políticos como UPyD, Equo o Podemos a esta modificación, el dirigente popular se limitó a decir que "habrá unas elecciones y los andaluces decidirán quiénes son los grupos parlamentarios, los partidos que representan a los ciudadanos y los diputados que van a estar en esa Cámara".

Mucho más rocambolesca fue la versión que en la habitual ronda de comparecencias de los portavoces parlamentarios de los miércoles dio el dirigente del PSOE, Mario Jiménez. Para Jiménez, la reforma obedece a la intención de los partidos políticos de evitar "elementos indeseables" como el transfuguismo y consideró que la reforma es "atinada y arroja transparencia". El socialista consideró que con esta reforma se dificulta que diputados que se vayan de su grupo y pasen a ser no adscritos se unan y formen un nuevo grupo. "Se endurecen las condiciones para constituir un grupo parlamentario y que no sea posible que diputados que salen de un grupo y de otro, en número de tres y con una interpretación difícil de Reglamento, pudieran conformar un grupo propio y acceder a los beneficios que desde el punto de vista político y económico tiene la constitución de un grupo".

Esta circunstancia es inédita en la historia de la Cámara autonómica, donde los únicos tránsfugas que se recuerdan se remontan a la primera legislatura, al principio de los años 80, cuando había una multitud de formaciones.

El portavoz socialista aludió a que en el ámbito municipal se han suscrito acuerdos de este ámbito y añadió que se ha aprovechado la reforma del Reglamento para introducir esta medida. Jiménez censuró que hay una interpretación, a la "que le faltan datos, de la que se puede interpretar que se está coartando el funcionamiento en términos democráticos". Jiménez no explicó cuáles son esos datos.

Aún menos comprensible fue la versión sobre el pacto que ofreció el portavoz de IU, José Antonio Castro, que confundió las cifras. La explicación de IU es que, según sus cuentas, la reforma apenas va a tener incidencia, ya que según Castro "apenas hay diferencias entre tener cinco diputados o al menos un 3% de los votos". "No hay diferencias apenas, hagan las cuentas. Entre tener cinco diputados o al menos el 3%, en fin... ¿Qué partido tiene cinco diputados con menos del 3%? Que nos lo cuenten", dijo Castro, aunque el texto antiguo se refería a un 5%.

En dos ocasiones ha habido un partido que se ha beneficiado de esta cláusula, el Partido Andalucista, que tanto en 1994 (tres diputados y 5,79% de los votos) como en 1996 (cuatro diputados y 6,66% de los votos) obtuvo grupo gracias a esta cláusula ahora borrada por PP, PSOE e IU.

Ninguno de los portavoces se arrogó la autoría de la iniciativa. Sólo Rojas dijo que "es de los tres". Tener un grupo garantiza una subvención individual e iniciativa propia en la presentación de propuestas y en el uso de la palabra.