Personas con un consumo abusivo o que han desarrollado una adicción a dos grupos farmacológicos, el MDMA (éxtasis) e hipnóticos y sedantes, demandan con mayor frecuencia ingresar en un centro de tratamiento para curarse de la drogodependencia. Representan aún un porcentaje minoritario -un 1,4% con respecto a otras sustancias adictivas, legales o ilegales-, pero su presencia se está incrementando "de manera notable". En 2007, las admisiones a tratamiento por MDMA y otros derivados de la feniletilamina aumentaron un 28,3% con respecto al año anteror, de 38% a 53%, y las motivadas por hipnóticos y sedantes se incrementaron un 27,1%, hasta 203 personas.

El informe anual sobre el Indicador de admisiones a tratamiento en Andalucía, elaborado por el Observatorio Andaluz sobre Drogas y Adicciones de la Consejería para la Igualdad y Bienestar Social, incorporó en 2005 a sus estadísticas estas sustancias psicoactivas. La razón: "El incremento de su incidencia, que ha motivado el interés del análisis de estos patrones de consumo".

El informe obtiene, gracias a las Fibat -Ficha de Información Básica de Admisión a Tratamiento-, datos sobre las características sociodemográficas, sanitarias y sobre las pautas de consumo de la población que es admitida a tratamiento en la red asistencial de Andalucía para, entre otras cuestiones, conocer cambios en las pautas de consumo que indiquen futuras tendencias.

Como ejemplo, el documento anota cómo se mantienen en ascenso, de una manera constante desde 1987 las admisiones a tratamiento por consumo de cocaína. En la actualidad, la cuarta parte del total de admitidos en centros, el 25,1%, tiene esta sustancia ilegal como principal adicción. Por primera vez desde que se registran estadísticas, los consumidores de esta sustancia han superado a los de heroína, sola o mezclada con cocaína base, lo conocido coloquialmente como rebujao.

Sin embargo, el ascenso de tratamientos por heroína en 2007 interrumpe una línea descendente desde 1998. Con respecto a 2006, destaca un aumento de admisiones por este tipo de opioides, cuyo consumo ha experimentando una progresiva decadencia desde la década de los 90. En datos globales, durante 2007 aumentaron, con respecto al año anterior, el número de admisiones a tratamiento por las diferentes sustancias y adicciones, excepto las motivadas por anfetaminas y alcohol.

Con los 18.147 pacientes con problemas de drogodependencia admitidos en los centros ambulatorios de la red pública y concertada, un 6% más que en 2006, se alcanza el registro más elevado desde 1998. Son las sustancias ilegales las que provocaron el mayor número de admisiones a tratamiento, el 59,6%, aun cuando entre las adicciones legales se han incorporado el tabaco y el juego patológico. El alcohol sigue siendo la sustancia adictiva con mayor número de admisiones a tratamiento, un 30,4%.

De los ingresados, el 40,3% habían realizado anteriormente algún tratamiento por la misma sustancia psicoactiva, el 54,5% no habían realizado nunca otro tratamiento por la misma droga y se desconoce el dato para el 5,2% restante.

Estos centros están especializados en la atención a los problemas derivados de las drogas, y además de tener funciones de atención ambulatoria a los drogodependientes que así lo solicitan, desarrollan actividades de información, prevención, programas de reinserción social.

La puerta de entrada al circuito terapéutico se hace a través de estos centros de tratamiento, siendo por tanto el canal de acceso al resto de los recursos y programas disponibles en la red asistencial. Entre ellos se encuentran las unidades de desintoxicación hospitalaria, comunidades terapéuticas, viviendas de apoyo al tratamiento, viviendas de apoyo a la reinserción, centros de día y centros de encuentro y acogida.

30,4%