El Servicio Andaluz de Salud (SAS) mantenía hace dos años una deuda con sus acreedores de 1.282,79 millones de euros. El dato lo facilitó ayer la Cámara de Cuentas de Andalucía en la presentación de su informe de fiscalización de las cuentas de la Junta en 2006, que el consejero mayor, Rafael Navas, entregó a la presidenta del Parlamento, Fuensanta Coves.

Aunque la sanidad andaluza presentó un superávit en sus resultados de 3,49 millones de euros, mantenía la deuda superior a los mil millones, de los que 902 correspondieron a los acreedores por operaciones pendientes de aplicar a presupuesto. Rafael Navas recordó que este dato "se ha ido incrementando en los últimos años hasta llegar a 750,5 millones en 2005 y sumar 902 millones en 2006". En la evolución de las partidas que conforman el remanente (el excedente de liquidez a corto plazo) se aprecia un descenso tanto de derechos pendientes de cobro (33%) como de las obligaciones pendientes de pago (20%). La Cámara destaca asimismo el "significativo cambio de signo en el resultado económico patrimonial del SAS" pasando de una situación de falta de ahorro de 69 millones en 2005 a obtener un beneficio al año siguiente de 60 millones.

El Gobierno autonómico cerró el ejercicio de 2006 con sus presupuestos ejecutados al 93% y con una liquidación de gastos de 28.900 millones de euros, de los que 4.771 millones se destinaron a personal y 1.909 a inversiones reales. La inversión por habitante se situó en los 711,81 euros, un 16% más que en 2005.

Las cuentas andaluzas permitieron un superávit de financiación de 1.805 millones tras los ajustes presupuestarios, lo que supone casi el doble que en 2005. La Cámara de Cuentas recomienda, no obstante, a la Consejería de Economía que elabore una norma para regular el proceso de consolidación de cuentas.

El informe también resalta el incremento de las modificaciones presupuestarias, que en el caso de la Junta supuso un 10,9% de aumento. El importe de las modificaciones presupuestarias llegó a los 1.642 millones de euros.