"Cuanta más luz haya wen todos los contratos, subvenciones y ayudas; cuanta más transparencia tengan las actuaciones de cualquier organismo o administración, va a ser mucho más difícil que se puedan llevar a cabo malas prácticas". El presidente del Parlamento, Juan Pablo Durán, hizo ayer un alegato en favor de la labor que realizan los órganos de fiscalización externa en la lucha contra el fraude y la corrupción.

Durán coincidió con el presidente de la Cámara de Cuentas, Antonio López, quien a su vez centró la importancia de estas instituciones en su tarea para la recuperación de la ética de lo público. "Es sumamen te necesario potenciar su papel de anticipar riesgos en materia de corrupción y sugerir sistemas de mejora", subrayó López. Ambos participaron en la inauguración de las III Jornadas de Estudio de los Servicios Jurídicos de los órganos de fiscalización externa.

López abundó en que la corrupción se ha destapado en los últimos años como la segunda preocupación de los españoles, por lo que resulta evidente que el papel de estos órganos no puede ser ajeno debido a la creciente inquietud ciudadana por esta situación. A su juicio, la actual situación demanda de los órganos de control un replanteamiento en la determinación de los objetivos de fiscalización.